La escuela donde estudié desde los 5 hasta los 15 años está cumpliendo su 75° aniversario de fundación.
Gracias por la formación que recibí, y por todo cuanto aportaron a construir lo que ahora soy. Cuántos amigos hice, y aún los conservo. Mis primeros amores, desamores, los libros, la poesía, la música, la ciencia del mundo bajo el microscopio, el universo con el telescopio, la fe, la oración, la comunión, el deporte. Ahhhhhhhh! mi queridísima escuela, cómo echo de menos aquellos años.
El Hno. Patricio (+), Hno. Elósegui, Hno. ¡Lázaro Maroto!, Hno. Mazariego, Hno. Luis Sicán (ahora layco), Hno. Feliciano (+), Hno. Huete, ….. puuuuuuuuuuu el Hno. Mario que debe estar muerto o demasiado anciano, cómo recuerdo su acordeón. El Hno. Nacho!, Hno. Adolfo, Hno. Carlos y tantos profesores más.
Lo inquieto que fui, lo aplicado en el estudio, las malas conductas desde siempre. Mongito: la casi-leyenda de la escuela, cuántos dolores de cabeza les di a todos.
Les agradezco infinitamente.
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HIMNO DE LA ESCUELA SAN ALFONSO
San Alfonso, nuestra escuela,
de las almas dulce hogar,
es palestra del que anhela,
fin glorioso coronar.
Nuestra escuela es cual colmena
que en jardín primaveral,
cumple a diario la faena
del riquísimo panal;
nuestra escuela es como un huerto
que se mira todo en flor,
bajo un cielo azul abierto,
donde brilla un sol de amor.
Nuestra escuela es cual un templo,
donde ofician la oración,
la palabra y el ejemplo
de cristiana formación;
bendigamos nuestra escuela
donde el noble educador,
como un padre se desvela
de los niños en favor.
*
Todo a Jesús por María y todo a María para Jesús.
Siempre Marista.